divendres, 7 d’octubre del 2011

LA DEPRESIÓN, PRINCIPAL RETO DE LA SALUD EN EL MUNDO


 fecha de publicación 


Este fin de semana se ha celebrado el Día Europeo de la Depresión. Este año la Asociación Europea de la Depresión (European Depression Association, EDDA) ha elegido el lema "la depresión: tratarla y vencerla", con el objetivo de incidir en la necesidad de que los gobiernos adopten medidas eficaces para combatir esta enfermedad, que hoy por hoy constituye el reto sanitario más importante a nivel mundial y una de las asignaturas pendientes de los sistemas sanitarios.

La depresión supone el motivo de consulta más frecuente en los servicios de Atención Primaria, -situación que se ha agravado con la actual crisis económica-, y, además, se trata del problema de salud más incapacitante a nivel mundial, por encima de cualquier enfermedad física. Así lo establece un reciente estudio de la prestigiosa revista Nature, donde se ha evaluado la inicidencia en el mundo de un conjunto de problemas de salud mental (incluida la depresión), así como se han analizado otros factores, como el soporte asistencial que prestan los gobiernos para dar solución a estos problemas y la calidad de las intervenciones que se ofrecen a la población.

El panorama mundial que se presenta en este informe, en el que han participando investigadores y expertos de más de 60 países, y titulado Grand Challenges in Global Mental Health (Grandes Retos de la Salud Mental en el Mundo), resulta demoledor. Tal y como señalan los autores, si no se ponen en marcha medidas eficaces para paliar esta situación,"se prevé un aumento notable de los trastornos mentales para el año 2020, incluido el número de suicidios".
A continuación, se ofrece para los lectores interesados, un resumen con las principales conclusiones de este trabajo:
Grandes Retos de la Salud Mental en el Mundo
  • Los trastornos mentales constituyen el 13% de la carga global de enfermedades, por encima del cáncer y los trastornos cardiovasculares.
  • Se da la circunstancia, además, que 8 de cada 10 países no cuentan con el soporte asistencial suficiente para hacer frente a estos problemas de salud mental. La ausencia de tratamientos adecuados y la práctica inexistencia de intervenciones dirigidas hacia la prevención suponen una grave carencia y reflejan "una limitada comprensión del cerebro", afirman los autores del trabajo.
  • Tal y como se detalla en el estudio, del conjunto de enfermedades mentales, la depresión, el abuso de alcohol, la esquizofrenia, el trastorno bipolar, las demencias degenerativas tipo Alzheimer y los trastornos por abuso de sustancias son los más incapacitantes (ver Tabla 1).
Tabla 1. Carga mundial de los trastornos mentales, neurológicos y de abuso de sustancias*


Causa

Años de vida asociados a discapacidad(millones)

Depresión

65,5

Abuso de alcohol

23,7

Esquizofrenia

16,8

Trastorno bipolar

14,4

Alzheimer y otras demencias

11,2

Trastornos por abuso de sustancias

8,4

Epilepsia

7,9

Migraña

7,8

Trastorno de pánico

7,0

Trastorno obsesivo-compulsivo

5,1

Insomnio

3,6

Trastorno por estrés post-traumático

3,5

Parkinson

1,7

Esclerosis múltiple

1,5

*Tomado de Collins y cols. (2011), Grand challenges in global mental healthNature, 475, pág.28

Los autores del informe alertan de las implicaciones que supone la alta tasa mundial de este tipo de trastornos de salud mental, y gracias al análisis y revisión del comité de expertos, formado por investigadores y profesionales de más de 60 países, establecen las áreas prioritarias de acción para combatir el problema de la salud mental y mejorar la calidad de vida de las personas afectadas, reclamando una acción urgente a nivel mundial y el aumento de la inversión para la lucha contra estos problemas.

Su análisis establece 6 metas fundamentales o grandes retos de la salud mental para la próxima década:
  • Invertir esfuerzos en la identificación de los factores de riesgo y los factores de protección que afectan a la salud mental y evaluar el nivel de impacto de determinados problemas mundiales, como la pobreza, la violencia, los conflictos armados, la emigración o los desastres naturales en la salud mental.
  • Mejorar las estrategias de prevención de los problemas de salud mental, así como incidir en la aplicación de intervenciones tempranas, sobre todo, desde determinados ámbitos de actuación, como los servicios de Atención Primaria, y prestando especial atención a los niños y adolescentes, así como a la prevención del consumo de sustancias en estas edades.
  • Reforzar los estudios de investigación para garantizar los tratamientos más eficaces en cada caso y facilitar el acceso de la población a la atención sanitaria.
  • Aumentar la concienciación social sobre la alta tasa mundial de este tipo de trastornos, estableciendo programas para luchar contra la discriminación social y el estigma que a menudo sufren pacientes y familiares.
  • Aumentar los recursos humanos destinados a la atención de la salud mental y mejorar la formación de los profesionales de la salud en este área para implementarservicios basados en la evidencia científica.
  • Transformar los sistemas de salud y las políticas sanitarias, con el objetivo de integrar los trastornos de salud mental en los cuidados de larga duración y equiparar la inversión en cuidados físicos y mentales en investigación, formación, tratamientos y prevención. Según los expertos, sería necesario también establecer unos estándares de calidad mínimos para el tratamiento de los problemas mentales a nivel mundial e incorporar la salud mental en los programas sanitarios internacionales.
De esta manera, los resultados de la evaluación del comité de expertos subrayan la necesidad de realizar investigaciones desde una aproximación al análisis de la salud mental a lo largo del ciclo vital, lo que implica tener en cuenta que muchos de los trastornos mentales se inician o se manifiestan en la infancia o adolescencia y pueden afectar igualmente a los niños y a la tercera edad.
Por otro lado, el informe reconoce que el sufrimiento que provocan los trastornos mentales se extiende más allá de las personas afectadas, a sus familiares y a la comunidad, por lo que resulta de crucial importancia adaptar los sistemas sanitarios a esta realidad. Además, se enfatiza en la necesidad de que tanto las intervenciones farmacológicas como psicosociales que conformen los planes de actuación en materia de salud mental, estén basados en la evidencia científica.
Más información en:

diumenge, 25 de setembre del 2011

MADRES ANTES QUE MUJERES


La psicoanalista Laura Kait estudia el embarazo adolescente a través de jóvenes gestantes de una residencia tutelada

Articulo extraido de I. DE LA FUENTE - Madrid - 19/06/2007 Publicado en EL PAIS

No eran aún mujeres y fueron madres. O al menos tuvieron que decidir con 16 o 17 años no ya si deseaban serlo sino si querían o podían. Más del 50% de los embarazos adolescentes se salda con una interrupción voluntaria de la gestación. En Cataluña, el porcentaje alcanza a más del 65% y en Madrid, en torno al 55%. La comunidad balear se haya a la cabeza de las interrupciones, junto con Cataluña, Madrid, Aragón y Murcia. En total, en 2005 se registraron 12.883 abortos en gestantes de 15 a 19 años (en 2004 fueron 11.677).
Tres de cada diez jóvenes, sin embargo, continúan con el embarazo, bien por razones religiosas o por un explícito apoyo familiar. Algunas se han convertido en hijas-madres dentro de su propio hogar: madres que dan el pecho o el biberón a una diminuta criatura aún más fragil que ellas, y a la que cuidan con tesón determinadas horas del día. Sólo unas horas. Porque además de ser madres, son hijas adolescentes. Como la madrileña Vanessa (nombre supuesto): interrumpió el bachillerato hace tres años, a raíz de la gestación de su hijo, se planteó trabajar como camarera cuando nació el bebé y, ahora, con más realismo, ha vuelto a estudiar para acceder mejor al mercado laboral.
El horario de la academia y las escapadas de los viernes con su pandilla le han convertido de nuevo en la adolescente que no ha dejado de ser aunque la bolsa de los pañales le acompañe en sus salidas al parque con el pequeño. Mientras, sus padres cuidan y en cierto modo crían, a su nieto-hijo. Vanessa ya no está con el medio novio del instituto con el que tuvo la criatura, y su familia lo celebra. Como pareja no tenían futuro. Como madre soltera amparada por sus padres y hermanos hasta que pueda independizarse, sí.
Se trata, en principio, de embarazos no deseados. "Entre los 14 y 20 años no suelen tener relaciones estables ni practicar sexo de modo regular", indica Ana García Mañas, responsable del Centro joven de Anticioncepción y Sexualidad de Madrid (CJAS). Por eso mismo, muchas cometen la imprudencia de tener relaciones sin protección. No es extraño que esa gestación llegue después de su primer o segundo coito. Y que tome posesión de un cuerpo inmaduro en lo físico y en lo emocional.
La psicoanalista Laura Kait llama la atención sobre el término "embarazo adolescente", es decir que "adolece" de lo requerido. "Es más que discutible que un bebé pueda llenar carencias o ayude a madurar. A un hijo hay que ayudarlo a crecer. Si la madre es inmadura o está desamparada, nadie ayuda a nadie. No se puede ayudar desde la impotencia", afirma.
La psicoanalista conoce bien esa doble orfandad: la de madres solas y casi niñas que traen -o no traen- al mundo hijos que a veces nacen ya huérfanos. Laura Kait ha trabajado varios lustros primero en residencias de menores de la la Diputación de Barcelona, y más tarde para la DGAIA (Dirección General de Atención a la Infancia de la Generalitat de Catalunya). Durante ocho años su labor se centró en una residencia maternal que acoge a chicas embarazadas. En este centro suelen convivir de modo temporal unas quince gestantes o madres.Kait vuelca diversas historias de estas chicas en Madres, no mujeres. Son historias reales aunque anónimas. La mayoría carece de recursos, sufre trastornos psicológicos o forma parte de familias desestructuradas que, de una manera u otra, las han expulsado de su entorno. ¿Qué salidas tienen? "Si la joven no puede hacerse cargo ni de ella misma, no podrá hacerse cargo de otro", señala la experta.
En la residencia se les prepara para el mercado laboral y para ser autónomas, pero los servicios sociales analizan si serán capaces de cuidar a sus hijos. Saber lo que quieren es ya un triunfo; saber lo que pueden es otro reto, explica Kait al concluir: "Sólo una de mis pacientes pudo recuperar a su hijo tras dejarlo durante dos años en una institución".
Solas y vulnerables
"Solas, vulnerables, y algunas terriblemente románticas". Ése es el perfil de madre adolescente que traza Rosa Ros, médico del centro de asistencia juvenil de Barcelona. El 70% de los que acuden al centro son chicas. Por origen, el 9% son extranjeras. Ros cree que la presencia de personas de otros ámbitos introduce matices en las relaciones juveniles. "Por un lado, vemos a chicas en dificultades a las que se han vedado los anticonceptivos y que, ante un embarazo, dicen que en su país o en su familia no se acepta el aborto. Por otro, adolescentes españolas educadas en la igualdad seducidas por chicos de otras culturas, a veces mayores que ellas, y de modales suaves, que sugieren que quieren ser madres porque 'él quiere un bebé' y ellas están enamoradas" añade.
¿Fantasías o rebrote de la maternidad? "El embarazo adolescente no deja de crecer, lo que demuestra que estar informado está a años luz de estar formado", apunta Kait. "Es paradójico que a la vez que se hacen campañas a favor de los anticonceptivos, a los críos se los llena por doquier de imágenes eróticas. Sin olvidar que el valor reinante es tener, tener y no importa qué. Una cría que se siente sola e impotente siempre podrá tener algo, por ejemplo: un hijo", reflexiona.

divendres, 16 de setembre del 2011

COMO HABLAR A LOS NIÑOS DE LA MUERTE

Articulo extraído del Boletin Informaticvo del INFOCOP , Consejo General de Colegios Oficiales de Psicólogos, publicado el 16-9-11.


Recientemente, el Observatorio de Salud de la Infancia y la Adolescencia Sant Joan de Dèu – Fundación FAROS se ha hecho eco de una guía titulada Cómo hablar con los niños acerca de la muerte, desarrollada por los Institutos Nacionales de Salud de EE.UU. (National Institutes of Health). Con el objetivo de ayudar a solventar las dificultades asociadas a este tema, se ha elaborado esta guía, que pretende facilitar información de carácter general, útil y flexible que permita adaptarse a la situación particular de cada familia. En la siguiente tabla, se presenta el índice del documento.
Cómo hablar con los niños acerca de la muerte
  • Los niños son conscientes
  • Obstáculos en la comunicación
  • Cuando no se tienen todas las respuestas
  • Superar los tabúes
  • La religión y la muerte
  • Oportunidades en la vida diaria
  • La muerte en la familia
  • ¿Deben los niños visitar a personas moribundas?
  • ¿Deben los niños asistir a los funerales?
  • La decisión de enviar a los niños a otro lugar
  • Los niños también lloran la muerte
  • En resumen
  • Libros para los padres
  • Libros para los niños 
Abordar el tema de la muerte con los más pequeños suele ser una situación peliaguda para la mayoría de los adultos. En gran medida, porque en muchas sociedades, especialmente en las occidentales, la muerte es un tema tabú, pero también porque se concibe como una experiencia negativa y, a veces traumática, queriéndose evitar el malestar a los niños. Sin embargo, la realidad es que la muerte es un hecho que forma parte de la vida cotidiana y es responsabilidad de padres, educadores, etc. ayudar a los niños a comprender qué es la muerte, a eliminar creencias erróneas y miedos, así como darles apoyo y consuelo.
Uno de los errores más frecuentes que cometen los adultos es creer que, si no se habla de este tema con los niños, ellos no se darán cuenta y no sufrirán. Sin embargo, esto es falso, porque la realidad es que los niños son grandes observadores que perciben todo aquello que les rodea y, en especial, aquello que más preocupe a las personas que son significativas para ellos. Por el contrario, la realidad es que, si los niños no lo comentan o no preguntan es porque no quieren que sus padres se preocupen más, no se sientan tristes, etc. No obstante, esta evitación lo que realmente está provocando es que no pueda saberse cómo se sienten los niños en realidad, cuáles son sus miedos, preocupaciones y emociones, igualmente, puede potenciarse el sentimiento de culpa y el desarrollo de ideas erróneas al respecto.
De esta manera, en este documento, se aportan una serie de útiles consejos que han de adaptarse al niño concreto y a su etapa evolutiva, siendo los siguientes los más destacados: 
  • Analizar y ser conscientes de los miedos y resistencias que tiene el adulto en relación a tratar el tema de la muerte en general, y con los niños en particular.
  • Ser sensible y adaptarse a las demandas del niño en cuanto al deseo de conversar sobre el tema de la muerte. Es el niño el que indicará al adulto cuando está preparado para hablar de este tema y hasta qué nivel de profundidad.
  • Es importante escuchar y respetar la concepción que tiene el niño sobre la muerte, pero sobretodo sus emociones, miedos y creencias sobre la muerte.
  • Responder a las preguntas que realicen los niños con un lenguaje claro y sencillo, adaptado a su edad.
  • Dar respuestas breves y sencillas.
  • Dar información veraz a todo aquello que nos planteen, no dar mensajes incongruentes que puedan promover asociaciones incorrectas (p. ej., no decir "el abuelo se ha dormido para siempre", porque puede facilitar que tenga miedo a dormir).
Fuente:
Nacional Institutes of Health (2007). Caring about kids: talking to children about death. Publicación DHEW 79-939. Disponible en: www.cc.nih.gov/ccc/patient_education/pepubs_sp/talkingsp.pdf.


divendres, 27 de maig del 2011

RESULTADOS DE LA INVESTIGACION SOBRE FECUNDIDAD Y TRAYECTORIA LABORAL DE LA MUJER EN ESPAÑA



ISSN 1886-1385 © INFOCOP ONLINE

El pasado día 10 de diciembre, en el Consejo General de Investigaciones Científicas(CSIC), se presentó el trabajo de investigación Fecundidad y Trayectoria Laboral de las Mujeres en España, financiado por el Instituto de la Mujer y dirigido por la demógrafa Margarita Delgado con la colaboración de Laura Barrios, Francisco Zamora, Noelia Cámara, Inés Alberdi y Alessandra de Rose.
En este estudio, se ha realizado una encuesta a casi 10.000 mujeres de edades comprendidas entre los 15 y los 75 años. Según la nota de prensa que se ha publicado en la página web del CSIC, los principales resultados de dicha investigación indican lo siguiente:
  • Se constata un proceso de cambio en las prioridades de las mujeres nacidas después de 1995. Efectivamente, el aumento del nivel educativo y, consecuentemente, de la incorporación de la mujer al mundo laboral ha influido en los procesos familiares. Más concretamente, la encuesta indica que las mujeres con un empleo fijo retrasan su maternidad. Además, cuando se comparan aquellas que tienen un nivel básico de estudios frente al grupo de mujeres que tienen un nivel superior de formación, se encuentran, no sólo diferencias respecto a la edad del primer hijo –25,1 y 32,4 años de media, respectivamente-, sino también una inversión en cuanto al proyecto vital relacionado con el trabajo y la maternidad, de manera que las primeras tienen hijos en primer lugar y después buscan un empleo estable y las segundas no tienen hijos hasta que no tienen una seguridad laboral.
  • La discriminación laboral ha aumentado en los últimos años, puesto que hasta un 75% de las madres trabajadoras afirman haber tenido problemas o dificultades en el trabajo relacionadas con su maternidad. Es más el 20,30% de las mujeres de edades comprendidas entre los 20 y 34 años reconoce que sus posibilidades de promoción laboral se encuentran claramente limitadas por tener hijos.
El periódico El País se ha hecho eco de este estudio y subraya que la mayoría de las mujeres se enfrenta a una decisión importante en sus vida, ¿tener hijos o trabajar?Desde hace varias décadas, la mujer tiene un nivel de estudios equiparable al del hombre y, por ello, lucha por obtener un empleo estable y acorde a su nivel de formación. En consecuencia, a pesar de que el deseo de tener hijos se mantiene, la maternidad se retrasa cada vez más, lo que contribuye a que tengamos una de las tasas de natalidad más bajas de Europa (1,38 hijos por mujer). Sin duda, el desarrollo de políticas de conciliación laboral y familiar más eficaces, siguiendo el ejemplo de otros países más avanzados en este campo (guarderías públicas, sueldo, flexibilidad horaria, etc.), contribuiría a invertir este proceso que, hoy por hoy, no garantiza en su totalidad la renovación poblacional.
Fuentes: 
CSIC 
El País

diumenge, 22 de maig del 2011

8 DE CADA 10 PACIENTES CON DEPRESIÓN ABANDONA LA MEDICACIÓN


El 78% de los pacientes con depresión abandona el tratamiento farmacológico antes de tiempo. Ésta es una de las conclusiones de un estudio publicado en la revistaEuropean Psychiatry y realizado en España, con una muestra de 7.525 pacientes.

El estudio ha sido llevado a cabo por un equipo de investigadores del Instituto Catalán de la Salud (ICS) y del Instituto de Investigación en Atención Primaria (IDIAP) Jordi Gol de Lleida, con el objetivo de evaluar la adherencia de los pacientes al tratamiento farmacológico de la depresión, así como los aspectos asociados al abandono del mismo. Para ello, y durante un periodo de 3 años, los investigadores realizaron un seguimiento del cumplimiento de la medicación a los pacientes que comenzaban un tratamiento antidepresivo.


De los datos obtenidos en el estudio, se observa que apenas un 22% de los pacientes evaluados consiguió mantener el tratamiento durante el periodo recomendado (esto es, un mínimo de 6 meses), mientras que la mayor parte (el 78%) abandonó el tratamiento antes de cumplir ese plazo, siendo el porcentaje de abandono más alto durante los primeros cuatro meses. Se observó también que los hombres presentaban más riesgo que las mujeres de abandonar el tratamiento farmacológico de manera temprana, ya que el 50% de los hombres manifestó haber dejado la medicación después de dos meses y el 50% de las mujeres después de tres meses.
Los resultados de esta investigación, -con un porcentaje de abandono del tratamiento antidepresivo del 78% de los casos-, ponen en entredicho el modelo asistencial que se presta habitualmente en nuestro país, excesivamente medicalizado y biologicista, y donde no se tiene en cuenta la participación del paciente en la toma de decisiones sobre su tratamiento.
Una tasa de abandono tan elevada cuestiona gravemente, además, la pertinencia de esta estrategia de intervención (el tratamiento farmacológico) como el abordaje de primera línea para la depresión. Más si cabe, si tenemos en cuenta que existen otras alternativas, como el tratamiento psicológico y, en concreto, la terapia cognitivo-conductual, que ha demostrado una eficacia igual o superior para el tratamiento de la depresión y que supone menos riesgos para la salud y menos efectos secundarios -véanse los recientes metaanálisis de Kirsch (2008), Khan (2002) y Fournier (2010)-.
Como ejemplo práctico, en el Reino Unido, uno de los países que ha sido pionero en la introducción de la intervención psicológica para los pacientes con problemas de salud mental (ansiedad y depresión) en Atención Primaria, los estudios publicados muestran que el éxito de estas intervenciones supera con creces al abordaje tradicional. Así, de acuerdo a los últimos datos publicados en la revista British Journal of Clinical Psychology, de un total de 2.017 pacientes que participaron en los programas de intervención psicológica, tan sólo 319 abandonaron el tratamiento, lo que supone el 15% del total. Entre los beneficios de la terapia psicológica, los autores señalan la eficacia en la reducción de síntomas asociados a los problemas de ansiedad y depresión, la disminución del riesgo de recaída de estos pacientes, el mantenimiento de los resultados a largo plazo y las altas tasas de recuperación alcanzadas, evitando la cronificación del trastorno y disminuyendo, consiguientemente, el número de visitas al médico (Richards y Syckling, 2009).
Las conclusiones de estos estudios, en su conjunto, ponen en evidencia que es imprescindible tener en cuenta la naturaleza biopsicosocial de los trastornos mentales para el diseño de las estrategias de atención sanitaria, de tal manera que dichas estrategias no se dirijan necesariamente hacia la medicalización, sino hacia la respuesta terapéutica que, sobre la base de la evidencia empírica, demuestre mayor eficacia y eficiencia. Sin embargo, para ello es necesario el establecimiento de un compromiso político que permita optimizar la calidad de la atención que se presta y que se proponga frenar las graves repercusiones que supone una mala gestión y asistencia de las personas con enfermedad mental, tanto para los propios afectados (riesgo de recaída, cronificación del problema, aumento de visitas al médico,etc.), como para el sistema sanitario y la economía del país.
Fuente:
Catalina Serna, M., Cruz, I., Real, J., Gascó, E. y Galván, L. (2010). Duration and adherence of anti-depressant treatment (2003 to 2007) based on prescription data base. European Psychiatry , 25, 206–213.
Referencias:


Fournier, J.C., DeRubeis, R.J., Hollon, S.D., Dimidjian, S., Amsterdam, J.D., Shetlton, R.C. y Fawcett, J. (2010). Antidepressant drug effects and depression severity. A patient-level meta-analysis. Journal of the American Medical Association, 303, 1, 47-53.
Khan, A., Leventhal, R.M., Khan, S.R., Brown, W.A. (2002). Severity of depression and response to antidepressants and placebo: an analysis of the Food and Drug Administration database. Journal of Clinical Psychopharmacology, 22, 1, 40-45.
Kirsch, I., Deacon, B.J., Huedo-Medina, T.B., Scoboria, A., Moore, T.J., Johnson, B.T. (2008). Initial severity and antidepressant benefits: a meta-analysis of data submitted to the Food and Drug Administration. PLoS Medicine, 5, 2, e45.

Richards, D.A. y Syckling, R. (2009). Improving access to psychological therapies: Phase IV prospective cohort study. British Journal of Clinical Psychology, 48, 377-396.

UN ESTUDIO EVIDENCIA UNA MEJORÍA SIGNIFICATIVA A LOS SEIS MESES DEL INICIO DEL TRATAMIENTO PSICOLÓGICO


Recientemente, Europa Press se ha hecho eco de un estudio realizado por Apertiaen colaboración con el Centro de Psicología Álava Reyes, cuyo principal resultado indica que las personas que acuden a tratamiento psicológico logran una mejoría significativa, experimentando un mayor bienestar psicológico, en un plazo medio de seis meses.

En concreto, para este estudio, se ha contado con un total de 110 casos clínicos atendidos en dicho centro de atención psicológica, de lo cuales, la mayoría eran mujeres (69%) con una edad media ligeramente inferior a la de los varones (38 y 41 años, respectivamente).

Al analizar esta muestra de pacientes, se encontró que el 92% del total de las personas atendidas mostraron una mejoría clínicamente significativa, definida como la reducción del malestar y un manejo más adecuado de los problemas por los que habían acudido a terapia, seis meses después del inicio del tratamiento psicológico. Así mismo, también se registró un incremento del bienestar psicológico, puesto que estos pacientes indicaron que su nivel de felicidad era mayor, que la confianza en sí mismos había aumentado, al igual que su nivel de optimismo y de satisfacción personal. En relación con la evolución del cambio, según se subraya en la noticia, parece que la mayor tasa de mejoría se alcanzaría a lo largo de los primeros tres meses, puesto que es cuando la persona aprende a "conocer e identificar sus puntos débiles (...) adquiriendo nuevas herramientas" más eficaces para el manejo y el afrontamiento de sus problemas. Después de estos primeros meses, los cambios logrados comenzarían a consolidarse y, aunque se detectan incrementos en cuanto a dicha mejoría, la velocidad de ésta sería menor. 
Estos datos, que, en general, se encuentran en la línea de otros estudios empíricos realizados sobre la eficacia de los tratamientos psicológicos, contrastan con otra noticia sobre el XXVIII Congreso Nacional de Enfermería de Salud Mental, también publicada por Europa Press en el mes de abril, en la que se indica que el consumo de fármacos antidepresivos se ha triplicado en nuestro país en la última década, suponiendo el 47% del gasto farmacéutico total en salud mental. Sin embargo, el 80% de los pacientes abandonan el tratamiento psicofarmacológico, tal y como se recoge en un estudio publicado por el equipo de Catalina Serna en la revista European Psychiatry. En consecuencia, parece plausible concluir que, según apuntan la mayoría de los datos, los tratamientos psicológicos no sólo muestran adecuados niveles de eficacia, sino que también presentan buenos niveles de eficiencia, puesto que son más baratos y presentan mejores índices de adherencia terapéutica, lo que, en definitiva, repercute en la calidad de vida de las personas.

Fuentes:
Catalina Serna, M., Cruz, I., Real, J., Gascó, E. y Galván, L. (2010). Duration and adherence of anti-depressant treatment (2003 to 2007) based on prescription data base. European Psychiatry, 25, 206-213.


dimarts, 17 de maig del 2011

LA ECONOMIA DE LA INFELICIDAD

Comentario:  Muy buen articulo que ilustra en qué medida nos afecta personalmente el estado de la economia y también en qué contribuimos como ciudadanos en la búsqueda de la "supuesta felicidad" basada en los objetos de consumo.
NOTICIA
La economía no es algo ajeno a nosotros. Los seres humanos formamos parte de ella del mismo modo que los peces forman parte del océano. Tanto es así, que podría describirse como el tablero de juego sobre el que hemos edificado nuestra existencia, y en el que a través del dinero se relacionan e interactúan tres jugadores principales: el sistema monetario, las organizaciones y los seres humanos. Cabe decir que esta partida está regulada por leyes diseñadas por los Estados. Sin embargo, por encima de su influencia, el poder real reside en los ciudadanos: con nuestra manera de ganar dinero (trabajo) y de gastarlo (consumo) moldeamos día a día la forma que toma el sistema.


diumenge, 20 de març del 2011